Más de 300 abuelitos que asisten a la olla solidaria en la Iglesia San Francisco, alistaron sus bolsos y se trasladaron al parque Dos Cerritos el domingo 17 de mayo para compartir un día de gratas sorpresas.
Entre las anécdotas recordadas, nos encontramos la de dos grandes amigos que mostraron mucho interés en asistir al paseo, prometiendo que no harían ninguna travesura. Al llegar disfrutaron a placer de los espacios del parque y sus rostros cubiertos de felicidad nos evidencian la importancia de fortalecer actividades recreativas en el adulto mayor, para contribuir a mejorar su calidad de vida.